En la cocina, sus hojas se utilizan como especia para sazonar carnes, pescados, aves, salsas (en especial de tomate), ensaladas, pastas, pizzas y caldos. Es además un ingrediente esencial en la aromatización del pozole, uno de los platillos más tradicionales de México,
Sus propiedades medicinales (alto contenido en minerales y ácidos) ayudan a disminuir dolores de cabeza, estómago, garganta, articulaciones y muelas. Contribuyen igualmente a prevenir problemas cardíacos, digestivos y de estreñimiento. Así mismo, alivian la tos, asma y resfriados.